Les presento a María de los Ángeles Mendoza Corpus, o como le gusta que la llamen “Angie”. Ella participo en el capítulo especial 2 de “mi historia de miedo” que nos platicaba de sus vivencias paranormales y a raíz de ese capítulo acepta de buena manera grabar su capítulo para Mi historia de éxito. Nacida en San Luis Potosí, hija de padres maestros y hermana mayor nos relata cómo fue su infancia y adolescencia en la ciudad de Acuña Coahuila, nos cuenta como descubrió que sentía una inclinación por la química, destacando en sus centros de estudios y participando en concursos locales, regionales y estatales, sembrándole en ella una espinita de tomar ese gusto para hacerlo su profesión. Sin embargo, uno de sus retos fue, convencer a sus padres. Pasa que los padres desean lo mejor para nosotros sus hijos siempre y ellos deseaban que su experiencia fuera de ayuda para Angie en una carrera de docencia y tras momentos de estira y afloja con ellos entre lo que ella deseaba y lo que sus padres querían, entro a estudiar a la escuela normal, y dándose cuenta de que eso no era lo suyo después de un semestre confronta a sus padres y principalmente a su madre diciéndole que estudiaría química, logrando ahora el convencimiento. Aquí nos enseña una parte muy natural de ella de luchar por lo que desea en modo de rebeldía, y eso impulsándola a viajar a una ciudad distinta, solicitar información de carrera y finalmente inscribiéndose en ella. Nos cuenta sus anécdotas graciosas de su etapa de “estudihambre” sobrevivir con 10 pesos, sobrevivir con 3 manzanas en 3 días, ir todos los días y regresarse en camión y vivir en casa de asistencia con sus compañeros de escuela, laborar durante sus estudios y al fin llegar a ocupar un puesto en un laboratorio químico. Como suele suceder los primeros trabajos no suelen ser los mejores pagados pero ella nos dice que había una gran satisfacción en estar laborando en algo de su carrera, cosa que en algún momento todos tememos, el no encontrar trabajo de lo que estudiamos, bueno Angie en más de una ocasión pudo ejercer su carrera y aplicar los conocimientos obtenidos durante esa dura época de estudiante foránea. Al finalizar los estudios una Angie que pensaba que su vida iba a tomar el rumbo que ella deseaba con nuevas metas, percibe de manera peculiar como es que su cuerpo cambiaba para darle la noticia a ella y su novio en ese entonces (Christian episodio 5) que sería madre. Entonces los planes que de alguna manera estaban puestos a futuro se adelantan para poder hacer las cosas como idealmente nos comenta que deben de ser y sobre todo por influencia de una familia convencional, de casarse y recibir a su bebe dentro del matrimonio. Esto aunado a su embarazo y posterior parto nos cuenta como se dio cuenta que sufrió de depresión post parto, un padecimiento que sufre un porcentaje de las mujeres después de recibir a su bebe, y que ella nos dice que no fue consciente de ello sino hasta poco más de un año y su lucha con este padecimiento la hizo pasar por un episodio muy duro. Fue gracias a su esposo principalmente que pudo anteponerse a ello y salir adelante, aprovechando igual la llegada de oportunidades de trabajo que le hicieron ponerse de pie y volver a decir que ella estaba fuerte y con energías renovadas. Angie estudio también una segunda carrera, nutrición y siendo muy buena alumna, como siempre lo fue, le permite dar clases incluso antes de terminar su carrera, teniendo tan buen desempeño que la hace escalar rápidamente a la coordinación de esta carrera en la universidad en donde estudiaba. Esto la hizo exigirse a ella tanto que tiempo después entro en el entendimiento que, había dejado de lado la atención a las personas más importantes, su familia por lo que ella después entendió que el trabajo por mucho que te llegaras a esforzar no iba a significar tanto para los demás que simplemente pueden opinar que no es suficiente. No obstante, después de esta valiosísima lección recibe una nueva oportunidad en una preparatoria técnica que le llevo a competir por una plaza en el sector educativo e impresionantemente sin competencia en su ramo, cual era este ramo, el de la química. Como comentaba después de esta lección aprendida nos cuenta como ahora disfruta de ser docente y que irónicamente era aquello que ella rechazaba en primera instancia, esta ironía es algo que se tornó bastante gracioso en su vida. Ahora Angie como docente disfruta su familia, incursiona actualmente en el mundo de los cristales y las energías y la rebeldía que la caracteriza no nos puede garantizar que se mantenga en un rumbo fijo, ¿decidirá estudiar una tercera carrera, volverá a los laboratorios de química? Creo sería posible y en sus palabras, desea que lo que ella vivió pudiera servir para quien escuchase que pueda salir adelante como ella nos cuenta que lo ha hecho.
