El bienestar social que compraba el petróleo se esfuma y se revela una realidad dramática: con el estómago vacío y la gente buscando comida en la basura, una caja de alimentos subsidiada por el gobierno se convierte en un grillete y en un chantaje para exigir lealtad revolucionaria. Los militares, comandados por un hombre que habla con los pájaros, se acuartelan en el poder. El país civil resiste y proclama a otro presidente en las calles.