En esta reflexión, se explora el Salmo 125 y el relato de Bartimeo en el Evangelio de Marcos, enfatizando la grandeza de Dios y la importancia de la fe. Bartimeo, un ciego mendigo, clama a Jesús por compasión y recibe no solo la curación de su ceguera, sino también una transformación en su vida. La respuesta de Jesús, al preguntarle qué desea, resalta la necesidad de acercarse a Dios con sinceridad y humildad. Esta reflexión invita a los oyentes a reconocer la luz y la compasión que Cristo ofrece, a confiar en su camino y a pedir lo que realmente importa en nuestra búsqueda espiritual.