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La mejor biografía que se ha escrito sobre Frida Kahlo, la pintora mexicana por excelencia.

¡Glip! ¡Glop! ¡Glup! ¿Qué parece vómito de perro, huele como una flor-cadáver, protagoniza la película más escalofriante que Stink Moody ha visto en su vida y es lo bastante inteligente como para recorrer laberintos? Es... moho viscoso, y está conquistando lentamente el cuarto de Stink.

Cuando los padres de Stink ganan boletos para una pijamada en el acuario con toda la familia, ¿será un sueño hecho realidad para Stink, fanático de la ciencia, o su peor pesadilla? Miedo, mucho miedo, muchísimo miedo. ¡Ay!

Todas las mañanas, Judy mide a Stink, y siempre mide lo mismo: 1.12 m. ¡Hasta Newton, un tritón que es la mascota de su clase, está creciendo más rápido que él! Pero un día sucede algo aún peor: ¡Stink mide medio centímetro menos! ¡No puede ser! ¿O sí? ¿Se estará encogiendo?

El increíble Rompemandíbulas Supergaláctico que Stink se compró no funciona: no le rompió ni una sola muela. Stink le escribe una carta al fabricante para quejarse... ¡y la respuesta que recibe es fantástica! Le envían (gratis) una enorme caja repleta de caramelos y dulces de todo tipo. Stink está tan contento que decide escribir más y más cartas. Pero eso le trae algunos problemas.

Son las vacaciones de primavera y Webster, el amigo de Stink, no está. ¿Ser o no ser un duendecillo de pantalones abombados y recitar poesía en el campamento de Shakespeare, con su amiga Sophie? ¡No tentéis a un hombre desesperado!

¡Stink no puede esperar para comprar el libro #5 de la serie Pesadilla en la calle Zombi y participar en la Marcha Zombi a la Medianoche! Pero con tanto hablar de no-muertos, ya empieza a preguntarse si los zombis lo persiguen. Sesos, sesos, sesos…

Se acerca el Pavotón y Judy Moody ha decidido que se llevará el gran premio: un pavo gordo y jugoso. Casi puede saborearlo mientras ella y Stink entrenan al ritmo del cronómetro Rapidfire Ultra XE611M25 de Stink. Pero ¿y si no ganan? ¿La familia Moody se perderá el plato fuerte en la cena de Día de Acción de Gracias? ¡Mollejas de pavo voladoras!

Judy, Stink y toda la familia Moody se refugian con latas de frijoles y baterías, listos para esperar a que pase la tormenta. Pero además del fuerte viento y las lluvias torrenciales, el huracán Elmer arroja fantasmas, ardillas y hasta extraterrestres. Justo cuando las cosas no podrían ponerse más extrañas, las luces parpadean y parpadean y… ¡se apagan en toda la casa! ¡Los Moody están en medio de un terrible apagón! ¿Pasará el huracán Elmer a la historia familiar de los Moody como una mala noticia, un recuerdo feliz o será simplemente una Historia Larga y Aburrida?

¡Menudos cambios de humor los de Judy Moody! Buen humor, mal humor, un humor de perros sobre todo el día de la vuelta al colegio. Pero cuando el profesor Todd pide a la clase que cada uno haga un collage sobre sí mismo, Judy se lo pasa tan bien que casi se olvida de su mal humor. Durante un mes, tendrá que componer un collage que explique cómo es ella. El único problema es que no pertenece a ningún club. ¿Cómo se las ingeniarán Judy Moody y su amigo Rocky para formar uno?

Judy Moody estudia el medio ambiente y descubre la destrucción a la naturaleza. Para evitarlo, Judy se propone salvar el planeta.

¡El primerísimo Gran Concurso de Lectura está por comenzar! ¿Podrán Judy Moody y el resto de los Gusanos Comelibros de Virginia Dare derrotar a los Defensores Chupasangre del Bigote Falso? ¡Es un misterio que no puedes dejar de leer!

Con la ayuda de su abuela Lou, Judy ha desenterrado pruebas de que algunos de sus antepasados Moody vivían en la antigua Inglaterra y, si las notas de su abuelo son correctas, Judy incluso podría estar relacionada con la mismísima reina. ¡Brillante!

Desde que su compañerita sabelotodo sale en el periódico por ganar un concurso de ortografía, Judy se empeña a toda costa en hacer algo que la haga famosa a ella también.

Judy Moody tenía ganas de pasar el mejor verano de su vida. Pero, claro, eso era antes de enterarse de que sus padres se iban a California y su tía se iba a quedar a cargo de ella. Además, tendrá que quedarse con su hermano pequeño, Stink, y cuidar de él. Pero, cuando el verano empezaba a volverse demasiado aburrido, Judy Moody tiene una idea fabulosa: retar a sus amigos a una emocionante carrera en busca del verano más raro y divertido que hayan podido imaginar.

Judy Moody tiene un anillo del humor que, además, tiene “poderes superespeciales”. ¿Habrá algo de cierto, o será Madame M nada más que una farsante? ¡Atrévete a preguntarle a Judy Moody una CMI (cuestión muy importante)!

Cuando en la tienda de mascotas se produce una disparatada invasión de cobayas enloquecidos, Stink y sus amigos, Sofía y Webster, entran en acción: emprenden un viaje para encontrar un hogar para cada una de los 101 conejillos de Indias.

Judy Moody no deja de ganar: ¡En el boliche, en el deletreo, en todo! Entonces su centavo de la suerte sufre un accidente catastrófico y ¡puf! ¡Adiós buena suerte! ¡Hola, C-A-L-A-M-I-D-A-D! ¿Acaso su buena suerte se fue por el retrete?

Judy Moody está haciendo y repasando mil veces la lista de regalos que quiere para Navidad, pero su hermano Stink sólo desea una sola cosa: NIEVE. Como en su ciudad no ha nevado en esas fechas desde hace más de cien años, ¡las posibilidades son prácticamente nulas! Todo indica que Stink se despertará el día de Navidad sin nieve. A no ser que Judy intervenga y, con la ayuda de un misterioso cartero llamado Jack Frosty, ¡consiga hacer realidad el milagro!

Judy Moody va con su clase a visitar la sección de Urgencias del hospital. En el hospital podrán verlo todo por dentro, escuchar su propio corazón y hasta observar un cerebro por rayos X. Las cosas parecen ir genial, hasta que un experimento de clonación pone a Judy en una situación delicada. ¿Podrá sucederle aún algo más a Judy?