Philosophy Middle Ages

La enorme cantidad de combatientes que periódicamente zarpaban hacia el Cercano Oriente para luchar contra los musulmanes son una prueba de la popularidad generalizada del aventurerismo en el extranjero en ese momento. La idea de una cruzada, en la que grandes ejércitos procedentes de varias regiones de Europa se reunían con el fin de luchar contra los musulmanes turcos y árabes, quedó tan arraigada que se amplió para incluir a las cruzadas contra las sectas cristianas europeas heréticas.

La enorme cantidad de combatientes que periódicamente zarpaban hacia el Cercano Oriente para luchar contra los musulmanes son una prueba de la popularidad generalizada del aventurerismo en el extranjero en ese momento. La idea de una cruzada, en la que grandes ejércitos procedentes de varias regiones de Europa se reunían con el fin de luchar contra los musulmanes turcos y árabes, quedó tan arraigada que se amplió para incluir a las cruzadas contra las sectas cristianas europeas heréticas.

It could be said that European kings and nobles in the Middle Ages were Crusade mad. The enormous amount of fighting men who periodically sailed off to the Near East to do battle with Muslims are evidence of the widespread popularity of overseas adventurism at the time. The notion of a Crusade, in which large armies assembled from various regions of Europe for the purpose of doing battle with Turkish and Arab Muslims, became so fixed that it was expanded to include Crusades against heretical European Christian sects.

Beginning with Charlemagne, the great and educated king who would serve as an inspiration for world leaders from Frederick II to Adolf Hitler, the Holy Roman Empire’s intricate ties with the Roman Catholic Church would provide for plenty of excitement and drama in its early years. However, as the empire staggered through the Middle Ages and into the Renaissance, it would eventually be forced to declare its allegiance with a new way of thinking: Protestantism.